Los peores duetos musicales de la historia

Dicen que en la unión está la fuerza, y así lo han demostrado los grandes duetos de la historia de la música, como el de Diana Ross y Lionel Richie o el de Celine Dion y Barbra Streisand. Sin embargo, en otras ocasiones, unir voces no ha sido una buena idea. De hecho, algunos duetos, aunque han contado con la fama de sus artistas, podrían calificarse como verdaderos desastres

¿Cuáles son algunos de los peores duetos musicales de la historia?

Viva Forever, de Luciano Pavarotti y las Spice Girls

Muchos de los amantes de la música lírica no acogieron de buen grado que el tenor haya decidido cantar junto al grupo pop británico, por muy famosas que hayan llegado a ser estas chicas. Sin embargo, los críticos consideran que este fue el mejor tema de las Spice Girls.

When You Look at Me, de David Bisbal y Miley Cyrus

Sin duda alguna, se trata de uno de los peores duetos musicales de la historia reciente. A pesar de que el tema está incluido en la banda sonora de la película “The Last Song”, y que la crítica especializada lo haya acogido relativamente bien, ni a los fans del cantante español ni a los seguidores de la cantante estadounidense les convenció esta interpretación.

Absolutamente, de Alaska y Sara Montiel

Muchos españoles no han apreciado el dueto de la cantante del grupo español Fangoria y Sara Montiel. Aún así, este tema, tan solo una semana después de haber salido a la luz, logró convertir al álbum homónimo en un éxito de ventas en España.

Sweet Lovin’ Friends, de Dolly Parton y Sylvester Stallone

Sobre las capacidades vocales de Dolly Parton nadie tiene dudas, su larga carrera como artista de música country habla por sí sola. Sin embargo, este dueto con Sylvester Stallone no ha sido una decisión muy acertada.

Superstition, de Jonas Brothers y Stevie Wonder

Con motive de la celebración de los Premios Grammy de 2009, los Jonas Brothers realizaron este dueto con el famoso Stevie Wonder. Interpretaron una de las canciones más populares del cantante norteamericano, con la que ganó en 1973 un Grammy a la mejor actuación vocal masculina en el género rhythm and blues. Aún así, este dueto tiene todas las cartas ganadoras para convertirse en uno de los perores de la historia musical.